«Estoy trabajando en lo que más me gusta en la vida»
Los primeros pasos hacia la celebración del Congreso Fallero se podrán dar en el presente ejercicio fallero
En menos de un año Pere Fuset se ha convertido un todo un personaje mediático de la sociedad valenciana, más allá de su representación fallera y festiva. Para las fallas supone un aire fresco a la fiesta, pero a la vez una incertidumbre, que día a día se va aclarando, de hacia dónde quiere llevar nuestra fiesta grande. Nos recibe en su despacho, funcional, lejos del lujo y por la cantidad de documentos sobre su mesa, despacho donde se trabaja, y mucho, posiblemente ya preparando la Gran Feria de Valencia, la feria de julio.
Ha sido un ejercicio marcado por las banderas, los poemas, subvenciones ¿Cuál ha sido el peor momento de este año? ¿Y el mejor?
No quiero hace ni voy a alimentar una lectura negativa del ejercicio por que ha sido un ejercicio espectacular. Muchas de las polémicas están basadas en rumores infundidos, en trolas y las que responden a hechos reales responden a cuestiones identitarias y políticas, y no a cuestiones falleras.
Creo que hay que dejar la política aún lado de las fallas. Yo creo que ha existido una reacción por parte de un determinado sector ideológico, que pensaba que era el amo de las fiestas como de muchas otras cosas de la ciudad y ha pretendido utilizar un espacio que debe de unir y cohesionar, para dividir y crispar. Creo que la gestión de las Fallas ha sido muy buena y así lo ha reconocido in mensa mayoría, no solo de los falleros sino del resto de la gente.
Sin tener la mayoría en la ciudad, gobierna para todos y gestiona/organiza las fiestas para todos ¿Cómo se hace esto?
Yo creo que la sociedad valenciana ha pedido eso, precisamente con su voto ha pedido dialogo, ha pedido gobiernos de progreso, de dialogo y de pacto. La gente está muy cansada de ordeno y mando, de mayorías absolutas, por lo tanto, lo que quieren es que nos sentemos, hablemos y lleguemos acuerdos.
Nosotros hemos configurado un gobierno con tres partidos progresistas. En ese sentido y en materia de fiestas no ha habido las mínimas fisuras y con la máxima naturalidad. Creo que la política en eso ha cambiado, y la gente precisamente dialogo. Ojalá en espacios como las elecciones españolas se hubieran alcanzado acuerdos como el que hemos sido capaces los valencianos de alcanzar.
Este concejal tiene el apoyo de la mayoría de los votantes que han votado un gobierno progresista, con unos programas progresistas. Lo que ha pasado es la época de la mayoría absoluta del partido popular después de 24 años. En ese sentido no he notado ningún tipo de problema, al revés, lo que veo incluso, es gente que no me ha votado, ideológicamente lejos, que me han reconocido que han tenido sus temores iniciales y que me luego han visto que el desarrollo ha sido positivo, y me han felicitado y me lo han agradecido.
¿Cuánto hay de político y cuanto de fallero en su día a día como concejal?
Creo que la política es todo, todo lo que tiene relación con la “Polis” la ciudad es política, no solo en los partidos en cualquier ámbito, todo es política. Lo que no me gusta es el uso partidista que muchas veces se hace de las cosas. Yo soy el concejal de fiestas, y soy el concejal de fiestas de todos. eso no quiere decir que deba renunciar a llevar a cabo un programa, que es el programa acordado por las tres fuerzas y votado por los electores. Y es lo que estamos haciendo, punto por punto.
Todo el mundo reconocía, con independencia de sus criterios ideológicos, que el programa electoral de Compromís referido a la cultura Festiva de esta ciudad, era el más preparado, el más consultado el más consensuado. Y ahora lo que estamos haciendo es ejecutarlo.
¿Cómo es un día de Pere Fuset?
Depende mucho, en esta concejalía no solo esta las horas de despacho, están obviamente los actos festivos. El mundo festivo valenciano es asociativo, por lo tanto, se reúnen cuando acaba la jornada laboral, por lo tanto, las jornadas son muy largas y los fines de semana no son para descansar, sino para continuar trabajando.
¿Le hubiera gustado desarrollar otra área en el consistorio?
No para nada, matizo, hubiera podido llevar otras áreas, pero esta es la que quería, y esta una de las cuales por las que me introduje en política. Estoy trabajando en lo que más me gusta en la vida, no puedo ser más feliz es ese sentido.
Hemos pasado del “maricón el que no bote” a “borinot el que no bote”, ¿son las fallas más tolerantes? ¿Existe un lobby gay fallero?
Existe esa conciencia en la sociedad que es consciente de que cuestiones como la homofobia, el machismo, la xenofobia, ha sido progresivamente desplazándose y han tomado más conciencia de que incluso el lenguaje puede ser discriminatorio. Creo que los que aún cantan este tipo de canticos nos son conscientes de lo que están diciendo, si utilizaran palabras como “negro”, “judío” u otras, serían más consientes.
Por contra, está el movimiento solidario fallero y vertebradoras.
Me quede sorprendido en los Premios de la Solidaridad que se dan por los proyectos presentados por muchas comisiones, pequeñas y medianas. Creo que hay una burbuja de titulares negativos sobre la fiesta y que tenemos que poner en valor, la fiesta como motor social, cultural y económico, y eso los que primero lo tenemos que hacer son los falleros. Las instituciones también, pero sobre todo los falleros. Exponer y tomárnoslo en serio. Esta fiesta, como digo yo, es mucho más que una fiesta.
¿Lo Rat Penat y sus concursos cuán de importantes son para usted y como encajan en el futuro?
Somos la única institución que ha mantenido una subvención a Lo Rat Penat. Más allá del papel, que tristemente, desde los años ochenta, porque es bastante reciente. han desarrollado en el conflicto unitario lingüístico valenciano, porque Lo Rat Penat siempre se ha caracterizado por ser la casa común de todos los valencianistas, hasta ese año en el cual expulsan a muchos referentes, somos la única institución que ha mantenido una colaboración con ellos.
Esta misma semana, nuestros funcionarios han estado acompañándoles y pagando los taxis, del concurso de Cruces de Mayo. Yo lo que le pediría a Lo Rat Penat, es que volviera a la senda que un día abandonó. La senda del consenso, de la paz entre valencianos de la unión, y de la defensa de la cultura y lengua valenciana, desde una perspectiva de consenso y no crispación.
Más allá podemos ver polémica tras polémica para ver qué hay detrás de ellas. Pero siento el máximo respeto por una institución que durante más de un siglo ha sido la casa común de todos los valencianistas, hasta que un día por motivos que se escapan a esta entrevista decidió dejarlo de ser y posicionarse con un sector.
¿Es un talón de Aquiles para JCF los jurados? De falla, de corte, etc…
No tengo en absoluto esa percepción. Este año es la primera vez que hemos consensuado un sistema de elección de jurados. Se recibieron seis propuestas, quisimos estimular la participación se sentaron entorno a una mesa y entre todos decidieron acordarlo.
Que luego el resultado no gustó, obviamente el que queda segundo, no le va a gustar. Que personalmente piense que puede haber un modelo de jurados mejor, también. Pero creo que nuestra obligación era conciliar todas las opiniones, ponérselas en la mesa y llegar a un acuerdo.
Se llegó a un acuerdo y fue aprobado por unanimidad en una asamblea de presidentes. Si nos hemos equivocado, nos hemos equivocado todos. Pero nuestra obligación Junta era precisamente favorecer ese dialogo, no hacer una propuesta, como no hicimos.
¿Cuándo el Congreso Fallero? ¿Es necesario antes de solucionar los problemas de la fiesta?
Yo creo que es conveniente, pero tenemos que llegar con los deberes hechos. No podemos llegar a un congreso fallero que dure un año. Tenemos que llegar a un congreso, el cual, hayamos llegado con esos previos suficientes como para que los tomemos como garantías. Yo creo que estamos es disposición de hablar de él y tomarlo con calma, porque ese congreso hay que hacerlo, y hay que hacerlo bien. Tiene que ser corto, contundente y con las conclusiones y los pactos ya preparados. Vamos a trabajar en eso. Creo que en este ejercicio podemos dar los primeros pasos.
¿Qué modelo de organización de las Fallas es por el que apuesta?
Junta Central Fallera se va a nutrir siempre del voluntariado, la gran ONG que trabaja por las fallas, pero una fiesta como las Fallas necesita cierta profesionalización, necesita recursos para la promoción de una fiesta, a dar servicio a las comisiones falleras, en materia de asesoramiento fiscal, económico, cultural, patrimonial, incluso de medios de comunicación y esto va a ser más fácil si contamos con recursos profesionales, que depender de disponibilidad de horarios al salir del trabajo. Creo que debemos piensas en una JCF útil para las comisiones falleras y para la fiesta en global, capaz de explicarla al mundo.
Áreas como asesoramiento fiscal y económico, de comunicación y promoción de la fiesta es conveniente, su refuerzo, y hay una asignatura pendiente en JCF que es la Falla. La Falla debe ser el centro de la fiesta porque es lo que nos hace singular, y sin embargo no hay un área que trabaja en ello, creo que tenemos que solucionar eso.
¿La ciudad de Valencia sabe que planta fallas todos los años?
Yo creo que sí, las fallas debemos ser conscientes que hay una ciudad todo el año y hay que buscar ese equilibrio. Yo estoy satisfecho por los servicios del ayuntamiento que han atendido las peticiones de las comisiones lo que han requerido, durante el mes de marzo se han ido detectando y se han resuelto todas las incidencias.
Pero es verdad que la ciudad debe saber que se plantan Fallas, y las Fallas deben ser conscientes que hay una ciudad en la que vivimos.
Debemos tener en consideración al resto de vecinos, que aunque esta fiesta la gestionemos el 10% es la fiesta del 100%, es la fiesta grande de la ciudad de Valencia y haríamos mal si nos miráramos el ombligo, debemos mirar afuera de nuestro casal y pensar que podemos hacer, porque eso va a ir en beneficio de nuestra fiesta, va a ser mejor valorada y vamos a tener menos problemas.
Es el concejal con más titulares y referencias en medios y en internet ¿Cómo se lleva esa sobre exposición? ¿Cuánto hay de real y cuanto de Postureo?
Yo soy tal cual, para bien y para mal. Asumo que tengo defectos, que hay cosas que van a gustar o no, que son subjetivas y que me van a criticar. Después de veinticuatro años de mayorías absolutas del partido popular, hay generaciones que no han conocido otra cosa y otras que estaban muy cómodas y tenían un cierto miedo a lo que pudiera venir.
Eso ha disparado unos ciertos disparates sobre que íbamos a prohibir los caramelos en la cabalgata de Reyes, se iban a cargar las mascletas, cuando ha habido más, que se iba a desplazar la ofrenda a la Alameda, que no iba a volver San José, etc… que han caldeado el ambiente de tal manera que han contribuido al personaje, pero que no tienen traslación con la realidad. Cuando voy por la calle me para, es para darme la enhorabuena, para comentarme algo, para felicitarme por que la FMI pudiera hablar en la Cridà, la Exposición del Ninot, la cabalgata del Ninot, el programa pirotécnico, siento el afecto del fallero de base. En este mundo estamos acostumbrados a oír a cuarenta o cincuenta voces pero estamos en un movimiento de cien mil personas. Creo que hace falta elevar nuevas voces y dar nuevas oportunidades para que se expresen. El mundo fallero es muy amplio y mucho más diverso y plural de lo que alguna gente le gustaría.
Es un amante y gestiona las Redes Sociales con gran profesionalidad ¿Se le han vuelto alguna vez en contra? Contesta a los comentarios como un auténtico comunity manager: cuéntenos su secreto.
Yo trabajaba de eso, y es parte de mi trabajo, que es comunicar lo que hago, explicarlo y más cuando tengo que hacer frente a determinadas intoxicaciones, pero sobre todo escuchar. Tengo que testear, recibir propuestas, lo que gusta lo que no gusta. Las Redes Sociales nos dan ese toque de espontaneidad y feeback que cualquier gestor debe utilizar. Para mi es una herramienta más de trabajo y comunicación. Lo que no suple en todo caso a un buen periodismo, precisamente cuando nos convertimos en emisor y receptor, es cuando más falta hace profesionales de la comunicación que sepan investigar, estudiar, contrastar y poder discernir entre lo que es real y un bulo.
Esta fiesta es un fenómeno cultural de primer orden y tenemos que buscar la excelencia y eso también afecta a la comunicación. El periodismo festero también es importante y las redacciones de los diarios generalistas se lo crean y que la prensa especializada sea rigurosa. Tenemos una fiesta tan impresionante, y aunque suene políticamente incorrecto, no nos la hemos tomado en serio, la hemos tratado como algo muy folclórico y secundario. Tiene un potencial enorme. La palabra es potencial, y esto afecta a todos los ámbitos y también a la comunicación.
Las fallas no son la única fiesta de la ciudad ¿Cómo gestiona el resto de fiestas?
Los falleros tenemos una doble condición, somos un poco absorbentes, pero a la vez ayudamos a celebrar el resto de fiestas. El caso del Corpus y su resurgir es gracias a la colaboración falleros que se implican en él. Tengo una buena relación con todas las fiestas, con la semana santa, es la segunda fiesta de la ciudad, es excelente, y luego hay otras fiestas como la Feria de Julio, que ha estado de capa caída, Expo Jove, la fiesta de noche vieja…Nosotros hemos querido trabajar la cultura festiva como un todo, primero cambiando la denominación de la concejalía, que refleja la filosofía: las fiestas son cultura. Forman parte de nuestra cultura y de nuestra forma de ser y tratar de darles la importancia y el peso que tienen. Hay que afrontarlo sin complejos, y como una oportunidad. No como el tópico “siempre estamos de fiesta”, sino “trabajamos mucho para tener fiesta”.
Algunos dicen que “Nada ha cambiado” y si embargo, otros dicen lo contrario. ¿Ha cambiado algo, o los cambios aún tienen que llegar?
Creo que podemos haber cometido errores y lo primero que hice, tanto en la Asamblea como en el Pleno, pedir disculpas por los errores que hayamos cometido y por los que cometeremos en el futuro, serán seguro que varios. Lo que ha habido este año han sido mejoras, cuestiones como conseguir el trato digno de la cobertura de las fallas en TVE, la exposición del Ninot, el espectáculo de la Crida que por primera vez fue elegido por falleros, el cartel de fallas que salió por toda Valencia, pero también en Madrid y Barcelona, el espectáculo de la plantà, etc… es una serie de cambios muy bien valorados.
¿Cuál es su balance general al mundo fallero de este primer ejercicio?
A los valencianos y en particular a los falleros en su conjunto, muy positivo, porque han valorado una cosa, que podrán estar de acuerdo o no, pero perciben que hay una concejalía un presidente de JCF que cree en esto, que lo vive, que se lo toma en serio y que tiene ganas de hacer cosas. A veces no dejo de comparar como, no dejo de ser como aquel presidente que entra nuevo en la falla, joven, que empieza a plantear cambios, porque en lugar de hacer esto así lo hacemos de esta manera, y eso genera a veces recelos, en algunas partes de la comisión, solo que yo tengo una comisión de cie mil falleros y todos los medios de comunicación delante, entonces la presión se multiplica. Creo que después de un año, ¿Qué ha cambiado realmente de las fallas? Todo sigue razonablemente bien y hemos venido a mejorar algunas cosas.
¿Hay más ilusión que improvisación?
Quien crea que improvise, que entre en el programa electoral y verá que estamos haciendo punto por punto, y ojalá nos da tiempo de hacer todo. Lo que si ha habido es un exceso de entusiasmo e ilusión. Un exceso de comboi, de querer llevar las cosas más rápido de lo que tiene que ser.
También ha habido obstáculos interesados y partidistas intencionados, por parte de alguna gente, que han querido que fiestas sea el punto de lanza de la oposición política. Gente que no ha asumido que hay una mayoría progresista gobernando legítimamente, que ni siquiera basándose en hechos reales, sobre cambios o innovaciones, han tratado de construir un relato, que es “se van a cargar las fiestas, ¿por qué? No lo sé, pero se las van a cargar, porque son izquierdas”, yo soy muy autocrítico con cierta izquierda que abandonó las fiestas, pero también soy muy crítico con el apoderamiento y secuestro que ha hecho determinada derecha.
Las fiestas no tienen color o los tienen todos. Esto es un espacio de cohesión y deberíamos hablar mucho menos de política y muchos más de fiestas, porque ahí nos entendemos siempre, y cuando lo hemos hecho, en las propias asambleas de Presidentes, nos hemos entendido siempre.
¿Qué nos deparará el nuevo ejercicio?
Vamos a analizar lo que ha salido bien, para intentar hacerlo mejor. Que es lo que ha salido regular o mal, para intentar que salga bien, y sobre todo seguir escuchando. Soy el Presidente de JCF que más se ha reunido con la Interagrupación, y lo seguiré haciendo. Intento tener un dialogo directo, la gente me considera accesible como para poder hablar. Tratar de conciliar intereses y opiniones es a veces es más complicado, porque no todos pensamos lo mismo.
Quiero trabajar la fiesta desde esa triple perspectiva: motor social, cultural y económico, y tomar las mejores decisiones en función de optimizar esas oportunidades y reducir los riesgos.
Tenemos que hacer frente a los problemas de la fiesta, que los tiene, y tratar de aprovechar mejor esas oportunidades. Quiero que hagamos un estudio en profundidad, para poder tener información, para que cuando la hostelería diga “es que me han producido unas pérdidas de tanto…” pues podamos decirle, “pues no”, para que podamos poner en valor todo lo que la fiesta de las Fallas aporta a la ciudad. Esto se traduce en una constelación de pequeñitas cosas, no es una revolución, es atacar esas pequeñas cosas, introducir esos pequeños cambios para todo vaya mejor.
¿Qué es aquello que le gustaría hacer durante su mandato en JCF?
Algunas cosas las he hecho el primer año, eran mucho más fácil de lo que parecía. Por ejemplo, la Exposición del Ninot, de pasar de una carpa a un museo, o que, por primera vez en la historia, se retrasmita la Crida por el canal internacional en la 2, la mascletà del día 19, en TVE, son cosas de las que me siento especialmente satisfecho. Por lo que me gustaría ser recordado es porque la gente vea que me he dejado la piel, que me he tomado en serio esta fiesta y llevarla a lo más alto. No hay una decisión concreta, a saber, luego por lo que seré recordado. Sobre todo, que la gente empatice y vea que en este despacho y en la calle se trabaja mucho.
Novedades…sobre todo quiero que Junta sea la casa de los mejores, que les apetezca estar en ella, en ese sentido, va a ver buenos fichajes.
Cuando se publique esta entrevista estarán decididas los artistas que realizarán las fallas municipales ¿Díganos como ha llegado a esta nueva fórmula de elección y por qué?
Hemos consensuado unas bases con el Gremio de Artistas Falleros, porque sus reivindicaciones no están tan lejos de las nuestras. El primer éxito, hemos consensuado las bases y luego la cantidad de equipos que se han presentado, se ha despertado el interés. Y el tercero, venimos de un modelo donde un político, porque al final era un concejal el que hablaba. Venimos de que un político elija una cuestión artística, a un modelo donde la sociedad civil valenciana, del mundo de las artes, de las fallas, de la cultura, eligen mediante un jurado que entienden de lo que se está hablando y se da la oportunidad a los artistas de venir a hablar y defender sus proyectos. Tratar las Fallas como lo que son, arte y cultura, y homologarlo a cualquier otra disciplina artística. El proceso garantiza que saldrá lo mejor.
¿Con cuál de los ninots en los que ha salido, con cual se queda, con San Marcelino o con el de Bolsería?
Me moló el de DJ Fusi de Reino de Valencia, me gustó uno que estaba huyendo de unos monstruos en una asamblea a de presidentes, porque en alguna ocasión me he podido sentir así, ha habido tantos que es difícil, pero es cierto que el del torero es de los más comentado. Hay una anécdota, un día en un bar, salió una mujer que me dijo “oye ¿tú no estabas en la Falla de Bolsería?¿El torero?” no me había reconocido por ser presidente de JCF, ni concejal, ni portavoz, sino como el ninot del torero, y bueno es divertido aunque sea publicidad engañosa.
Nos despedimos de él, mientras recibe a su siguiente visita, aún sin conocer los nombres de los artistas que plantarán las fallas municipales, pero que en este número ya damos buena cuenta de ellas. Le deseamos la mayor de las suertes, como a cualquier concejal que asume una cartera tan complicada y satisfactoria, a la vez, como son fiestas, y nos citamos para una pronta cita, lo prometido es deuda, donde seguir tomando el pulso a las Fallas con el máximo responsable de Junta Central Fallera.
Juan Meneses. Director de Don Falleret.
Fotografias: Cesar González
© 2016 Don Falleret. Todos los derechos reservados.